No entiendo por que todas las personas dicen que se deben olvidar las cosas malas del 2013, siempre pensamos que un nuevo comienzo debe ser mejor que lo vivido anteriormente, esto reafirma la necesidad humana de siempre intentar no cometer errores, de sentirse siempre protegido y en lo correcto. Si, ple mente empezar un nuevo nuevo año es una nueva oportunidad para soñar, para vivir, pero jamás para olvidar lo vivido. Las cosas malas siempre suceden por algo, son la única forma de aprender lecciones. El sufrimiento, es una dura forma en que la ventura nos recuerda lo vivido, lo elegido y sus consecuencias.
No olvidemos el 2013, ni las cosas buenas ni tampoco las malas, todo forjó nuestra vida y nuestro carácter; no olvidemos para que no cometamos los mismos errores, sino errores nuevos que nos enseñen cosas valiosas para el resto de nuestra existencia.
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